lunes, 28 de noviembre de 2011

JUANA I la Loca

Juana, la tercera hija de los Reyes Católicos, nació en Toledo el 6 de noviembre de 1479.

Desde pequeña, fue una niña formada y educada. Recibió una cuidada educación, muy marcada por una  moral católica, donde tambien se formó en música o en lenguas latinas.

Juana era una joven atractiva, de rubios cabellos, que era pretendida por muchas casas reales europeas. Como era común, sus padres, convenieron su matrimonio, que finalmente fue con el heredero del Sacro Imperio Romano Germánico. El conocido como Felipe el Hermoso.




En agosto de 1496, la joven Juana partió desde Laredo en una gran flota marítima que la llevaría a tierras de Flandes. Se dice que desde el primer momento que vio a su prometido Felipe, se enamoró perdidamente de él. Se casó, obteniendo los títulos consortes de archiduquesa de Austria, duquesa de Borgoña y Brabante y condesa de Flandes. En los primeros años, tuvo a sus 3 primeros hijos: Leonor, Carlos (futuro emperador) e Isabel. 

Juana tenía un carácter sobrio y católico que chocaba constantemente con la forma de vivir en la corte de Bruselas, mucho más opulenta, libertina y desinhibida. Se dice que Felipe tenía un carácter mujeriego y que engañaba a su mujer. Esto provocó que Juana sufriera de unos enfermizos ataques de celos que era conocidos tanto en la corte española como en la flamenca.

En los años siguientes, los hermanos y herederos de la Corona de Castilla, mueren sucesivamente, haciendo que Juana y Felipe tengan que trasladarse a Toledo en 1502, donde Juana jura como la heredera del reino. Los próximos tiempos serán convulsos para la pareja, pues mientras ésta da a luz en Madrid a su cuarto hijo Fernando, su marido pasaba largos meses en Flandes, lo que acuciaba aun más sus celos y obsesión por él.






El 26 de noviembre de 1504 muere la reina Isabel, por lo que Juana es nombrada Reina de Castilla. Antes de su definitivo traslado a España, tiene en Bruselas a su 5º hijo, la princesa María.

Tras su llegada, el poder del reino está muy disputado. Finalmente sellan un acuerdo, conocido como la Concordia de Villafáfila, a través del cual el rey viudo, Fernando de Aragón, se limitaría tan solo a gobernar su corona, abandonando la regencia de Castilla. A su vez, Felipe sería nombrado Rey de Castilla, con todos los poderes, en igualdad de condiciones que su esposa Juana. Por tanto, las Cortes reunidas en Valladolid nombraron como tal al Rey, Felipe I, en junio de 1506.




Pocos meses más tarde,  Felipe, en una estancia en Burgos, cae muy enfermo tras beber una jarra de agua tras practicar deporte. Se cree que fue fruto de una conspiración, y que aquel agua estaba envenenada. Lo cierto es que murió días más tarde el 25 de septiembre del mismo año, con tan solo 28 años, dejando viuda a la reina.

Juana, que se encontraba aun encinta de su última hija Catalina, cayó en una profunda depresión. Ordenó una comitiva para cumplir con el último deseo de Felipe, ser enterrado en Granada. La caravana avanzaba a un paso muy lento, con una reina ausente de sus funciones, que no se separaba jamás del féretro de su difunto esposo.

Los nobles, cansados de lo que calificaron como estado de demencia de la reina, impulsaron a su padre, Ferando el Católico, a que asumiera nuevamente la regencia de Castilla. En 1509 por tanto, Juana I es apartada de sus funciones por su padre, y es encerrada en un palacio de Tordesillas, acusada de no estar en condiciones mentales para gobernar el reino.




En 1516 muere Fernando. En este momento, Juana hereda en su persona los poderes así mismo de Navarra y de toda la Corona de Aragón, siendo la primera monarca que asume en una sola persona, el poder único y legítimo de todos los territorios que serán conocidos como España.

No obstante, tal honor le sirve de poco, pues el poder no le es devuelto. El Cardenal Cisneros asume la regencia, en espera de la llegada del hijo de Juana y heredero el emperador Carlos, que menor de edad, aun se encontraba formandose en Flandes.

Con la llegada de Carlos, todo sigue igual. Juana sigue confinada en Tordesillas, con su hija pequeña. Cuando esta contrae matrimonio, la reina queda sola y abandonada. Muchas son las voces en las tierras castellanas, que hablan de que la reina no está en absoluto loca, sino que más bien todo se ha tratado de una estrategia orquestada primero por su padre y despues por su hijo y sus lugartenientes, para apartarla del poder de por vida.



Juana, que se quejó por escrito en numersosas ocasiones a su hijo el emperador de las lastimosas condiciones en las que la mantenían encarcelada, sin éxito alguno de ser complacida. El 12 de abril de 1555, la reina Juana I, muere a los 75 años en su cautiverio de Tordesillas.

Juana I, la que fue popularmente llamada Juana la Loca, es uno de los personajes más inspiradores del romanticismo en España. Fue apartada de sus poderes por considerarsela demente, lo que probablemente solo fue un estado de desesperación y depresión causado por sus ataques de celos y la posterior pérdida trágica del gran amor de su vida, Felipe el Hermoso.

jueves, 21 de abril de 2011

FELIPE V de España

Philippe de Bourbon nace en Versalles (Francia) el 19 de diciembre de 1683. Era nieto de Luis XIV, el Rey Sol y su mujer María Teresa, Infanta de España. A su vez, era el segundo descendiente de su hijo y heredero Luis, el Gran Delfín, que moriría antes de reinar. Ostentaba en Francia el título de Duque de Anjou.

En Madrid, en el año 1700 muere el rey Carlos II sin descendencia. Deja en su testamento la voluntad de que sea su sobrino, Felipe de Borbón, el que herede el trono español. Así fue nombrado como tal desde Francia, en una ceremonia celebrada por su abuelo Luis XIV. Llega así a Madrid con 17 años, y nombrado como Felipe V Rey de España.



Desde un principio se enfrentó a la oposición de Leopoldo, emperador germánico, que consideraba a su hijo el Archiduque Carlos de Habsburgo, como legítimo heredero de la corona española. En los sucesivos meses, el rey de Francia cometió numerosas injerencias en Inglaterra, y desde París se planearon los matrimonios de 2 hermanos con 2 hermanas. Felipe V de España, se casó con Maria Luisa de Saboya, de la misma forma que Luis, hermano mayor de Felipe y heredero de Francia, se casó con la hermana de Maria Luisa. Esto causó un gran revuelo en las cortes europeas, que confirmaron con este hecho las intenciones de crear un gran imperio borbónico que dominase toda Europa occidental. Comienza así, la Guerra de Sucesión Española.

Esta guerra fue una guerra entre potencias europeas, a la vez que una guerra civil española. Se enfrentaban los partidarios de Carlos contra los de Felipe. Lo que primero fue una guerra internacional principalmente entre Austria, Inglaterra y Holanda contra Francia, pronto llegó a las regiones españolas. En grandes líneas, las regiones de la antigua Corona de Aragón, dieron mayor apoyo a los austricistas, y el resto de regiones a los borbónicos. Tras la Batalla de Almansa en 1707, las tropas de Felipe tomaron el control del Levante y Aragón.




En 1713, Carlos es nombrado emperador germánico, por lo que sus aliados le retiran el apoyo en sus
ambiciones españolas. Se llega así al Tratado de Utrecht, por el cual Felipe V es reconocido por todas las potencias como rey legítimo, a cambio de renunciar a sus derechos dinásticos en Francia, y a cambio de que España pierda sus posesiones europeas (Países Bajos, Flandes, Milán, sur de Italia, etc.) así como Menorca y Gibraltar.

En España, se promulgan los Decretos de Nueva Planta, por los que desaparecen los fueros de las regiones levantinas, en pro de construir un estado centralizado. Algunos territorios como Navarra, sí conservaron sus fueros, como premio por haber apoyado al rey durante la guerra. En cuanto a la gestión del país, introdujo determinadas reformas. Cambió el regimen de impuestos, creó las secretarías de estado (ministerios), creó las capitanías generales como división administrativa. Reestructuró la economía, fomentó el proteccionismo, la agricultura y las manufacturas. Cambió el régimen militar de los tercios, sustituyéndolo por el sistema de divisiones actual. Dio igualmente un gran impulso a la Armada Española de forma que siguió manteniendose como una de las más potentes del mundo. Fundó la Real Academia Española, y  mandó construcciones importantes como el Palacio Real de Madrid, o el Palacio de la Granja de San Ildefonso. Dio un aire más moderno e ilustrado a la empobrecida y estancada España del anterior monarca.




En el ámbito personal, Felipe tuvo 4 hijos con su esposa la reina Maria Luisa. Solo 2 de ellos, Luis y Fernando, sobrevivieron a la infancia y ambos fueron reyes. Maria Luisa Gabriela, quien fue considerada una buena regente durante la ausencia del rey por la guerra, falleció en 1714 con tan solo 25 años. El rey, contrajo matrimonio con una princesa parmesana, Isabel de Farnesio. Esta fue famosa por su duro carácter y su gran influencia en las cuestiones de estado. Tuvo 7 hijos más, y se preocupó por que todos ellos tuvieran una posición dominante, como monarcas los varones, o como reinas consortes las mujeres. Entre ellos cabe destacar el futuro Carlos III.

Felipe V solía tener grandes depresiones, en las que se retiraba a La Granja para recuperarse. Hastiado por el peso de su reinado, Felipe abdicó en su hijo en 1724, siendo coronado como Luis I. Sin embargo el reinado de su hijo duró tan solo 229 días, ya que moría el mismo año infectado de viruela. Felipe V fue por tanto, reinstaurado rey.




En su 2º periodo, la política estuvo orientada en pactos y alianzas con los reinos europeos, que iban variando según los intereses. Se llevaron a cabo 2 veces los llamados Pactos Familiares con Francia, por el cual los príncipes españoles se aseguraban la posesión de estados satélites en Italia, como Nápoles, Sicilia o Parma.

Felipe V muere en Madrid el 9 de julio de 1746, a los 63 años. Fue enterrado por deseo propio, en la cripta del Palacio de La Granja en dicha localidad segoviana. Su sucesor fue su 2º hijo, Fernando VI. Se convirtió así en el único rey padre de 3 reyes: Luis I, Fernando VI y Carlos III. Fue el rey que más tiempo ha permanecido en su cargo, sumando 45 años en el poder.


jueves, 24 de febrero de 2011

GUTIERREZ MELLADO

Manuel Gutierrez Mellado nace en Madrid el 30 de abril de 1912. A los 4 años queda huérfano de padre, y a los 8 años, tambien de madre. Recibió ayudas que le permitieron estudiar en las Escuelas Pías de San Antón en Madrid.

A los 17 años comienza su vida castrense, ingresando en la Academia General Militar de Zaragoza. De ella salió en 1933, a los 21 años, siendo el primero de su promoción, graduado como Teniente de Artillería. Estuvo destinado en Segovia y Carabanchel, hasta que en 1936 estalla la guerra civil.



Gutierrez Mellado, perteneció a uno de los tantos regimientos sublevados el 18 de julio. La zona en la que se encontraba fue rodeada, por lo que fue detenido y encarcelado en la cárcel de San Antón. En 1937 fue absuelto en un juicio, y consiguió refugiarse en la embajada de Panamá, con muchos otros nacionales. Consiguió cruzar las líneas y volver a zona nacional. Participó en el Servicio de Inteligencia Militar, y fue un infiltrado quintacolumnista dentro de las líneas enemigas. Usó una identidad falsa, Teodosio Paredes, con la que recababa información en Madrid y ayudaba a nacionales a cruzar al territorio de su bando.

Finalizada la guerra, siguió su larga carrera en el ejército, donde vivió sucesivos ascensos en el rango: así fue ascendido a Capitán en 1938, Comandante en 1942, Teniente Coronel en 1957, Coronel en 1965 y General de Brigada en 1970, siendo destinado al Alto Estado Mayor de la Defensa. En 1973 es ascendido a General de División, y es destinado como jefe de la Capitanía General y la Gobernación de Ceuta. Tras la muerte de Franco, sigue subiendo puestos en su carrera, es ascendido a Teniente General, y obtiene el cargo de Capitán General de la VII Región Militar, en 1976. El mismo año, es nombrado además, jefe del Estado Mayor Central.



En 1976, entra en el Gobierno de España de mano del presidente Adolfo Suárez, ocupando los puestos que le otorgarían mayor reconocimiento por la sociedad española, el de Ministro de Defensa, y Vicepresidente del Gobierno. Este cargo lo volverá a desempeñar en la Legislatura Constituyente 1977-1979, y en la I Legislatura post-constitución.

La vicepresidencia de Gutierrez fue muy difícil. Los años de la transición fueron años muy duros, en los que los militares sobre todo, eran objetivo directo de la banda terrorista etarra. La población castrense y el ala más próxima a la dictadura, estaban muy disgustados con el vicepresidente, al que acusaban de blando y traidor, por no aplicar medidas con dureza para acabar con el terrorismo que tanto lastraba a la población militar. Tanto él como Suárez sufrieron duras críticas, que desembocaron en la ya conocida dimisión del gobierno de UCD en 1981, punto en el que Gutierrez abandona definitivamente sus cargos políticos.



Gutierrez Mellado protagonizó una de las escenas más representativas de la transición española. La tarde del 23 de febrero de 1981, cuando el Congreso de los Diputados votaba la investidura de Calvo Sotelo como presidente, se produjo un golpe de estado. Cuando el teniente-coronel Tejero irrumpió con sus hombres en el parlamento, el vicepresidente fue el unico miembro de la cámara que se levantó de su escaño. Plantó cara a los golpistas, y les exigió como Vicepresidente y como superior militar, que depusieran las armas. Los golpistas lanzaron entonces ráfagas disparos dentro del parlamento, y el propio Tejero zarandeó y trató de derribar al general en un forcejeo sin éxito. Este gesto, en la que un hombre de 70 años se enfrenta y resiste ante unos hombres armados, arriesgando su vida en defensa de la democracia, le otorga un gran prestigio y simbología popular.



Años más tarde, retirado de la vida política, vivió de cerca un fallecimiento por culpa de la droga, que causaba estragos en los 80. Por ello, decidió fundar en 1986 la FAD, Fundación de Ayuda contra la Drogadicción. En 1994 fue nombrado de forma honorífica Capitán General del Ejército, a la misma vez que el rey le nombra Marqués de Gutierrez Mellado.

El 15 de diciembre de 1995, mientras se dirigía a Barcelona para dar una conferencia en una universidad, patina en el hielo con su coche, en un punto negro de la A2 en la provincia de Guadalajara. El accidente, pese a no ser muy grave, le provocó una hemorragia pulmonar que acabó con su vida en el traslado en ambulancia hacia el hospital. Fue enterrado en Villaviciosa de Odón, localidad de la que era hijo predilecto.

Moría así, con 83 años, quien fue considerado pese a todo, uno de los principales padres y garantes de la restauración democrática en España.

miércoles, 26 de enero de 2011

EL CID CAMPEADOR

Rodrigo Díaz de Vivar nace en la localidad de Vivar, cerca de Burgos, en una fecha incierta, cercana al año 1050. Su ascendencia no está claramente acreditada. Se cree que desciende de los Laínez o Flaínez, familia de Jueces de Castilla por parte de padre, y de parte de los Álvarez de Asturias, otra familia noble castellana, por parte de madre.

Rodrigo desde muy joven formó parte del séquito de la corte real leonesa. Fue paje de Sancho II de Castilla cuando este aun era príncipe. En la corte, aprendió el uso de las letras, el manejo de las armas, incluso recibió nociones en asuntos de derecho y leyes de la época.




A la muerte del rey Fernando I, León se desintegra en 3 reinos para los 3 hermanos: Galicia, León y Castilla. Fue Sancho II el rey de Castilla, quien nombra al Cid como caballero, en la década de 1060. Rodrigo gozó de sus favores, y fue nombrado armiger regis, cargo similar al de escudero real. Le acompañó como leal guerrero en todas las batallas que este llevó a cabo contra sus hermanos y derrotándolos, en las cuales por sus heroicas victorias, se ganó el sobrenombre de Campeador.

Al poco de unificar los reinos, en el año 1072, la hermana de los 3 reyes, la infanta doña Urraca, promovió un levantamiento noble de la ciudad que heredó de su padre, Zamora. Sancho II y el Cid sitiaron la ciudad, pero el rey fue asesinado. Alfonso VI, uno de los 3 hermanos enfrentados, sucedió al fallecido como rey del territorio unificado.

Rodrigo aunque fue relevado como escudero real, tuvo una buena sintonía con el nuevo rey. Le tenía una gran confianza, hasta el punto que contrajo matrimonio con doña Jimena, una noble asturiana que además era sobrina del propio Alfonso. Con ella tuvo 3 hijos: Diego (tambien guerrero), María  y Cristina.



En 1079 Alfonso VI nombra a Rodrigo el encargado de cobrar las parias a Almutamid, el sultán de la taifa de Sevilla. Durante estas labores, defendió al sevillano frente al sultán de Granada en una batalla entre taifas, pero del mismo modo que el Cid en Sevilla, el noble García Ordoñez defendía al granadino. Esto causó que García (quien era el nuevo escudero del rey) fuese arrestado por los sevillanos, provocando una enemistad entre Alfonso y Rodrigo. En 1080 unas tropas moras realizan una incursión en Soria, repelida por el Cid, que persiguiéndolos se adentra en la taifa de Toledo y lleva a cabo saqueos en pueblos vasallos de Alfonso VI. El rey le aplica al Cid la ira regia, por lo que es desterrado del reino.

Viajó a Barcelona para ofrecerle sus servicios a los condes de la ciudad, los gemelos Ramón Berenguer II y Berenguer Ramón II, pero estos no le aceptan la propuesta. Se traslada entonces a Zaragoza, donde es contratado por Al-Muqtadir, sultán de la taifa. El campeador lideró varias batallas contra líderes moriscos de la zona, aliados al rey de Aragón y del conde de Barcelona. En una de las mismas, llena a ser capturado Berenguer, el conde. Rodrigo fue recibido como un héroe por los moriscos de Zaragoza al grito de sidi (señor), que es lo que le otorga el sobrenombre de Çid campeador.



En 1085, el rey Alfonso conquista finalmente la taifa de Toledo, y al año siguiente sitia Zaragoza. Durante este sitio, el monarca se reconcilió con el de Vivar, ya que este necesitaba los mejores líderes militares para defender las nuevas reconquistas cristianas. Se le concedieron varios dominios en Castilla, como Dueñas, Briviesca y Langa de Duero entre otros. En los siguientes años, el Cid se alía nuevamente con el sultán de Zaragoza para ayudar al de Valencia, que estaba siendo asediado por una alianza formada entre el rey moro de Lérida y el Conde de Barcelona, teniendo lugar importantes batallas en Murviedro (Sagunto) con tropas de los principales reinos tanto cristianos como moros.

Levantado el asedio catalán a Valencia, en 1088, el rey de León-Castilla conquista la ciudad de Aledo (Murcia) con el objetivo de controlar las taifas del sureste. En el transcurso de las batallas, Alfonso VI ordena a Rodrigo que acuda con su mesnada a socorrerle, pero este se queda en Murcia no llegando a encontrarse con el rey. Por este hecho, es acusado de traición y nuevamente forzado al destierro, y se traslada a Calamocha.



A partir del año 1090, el campeador comenzó a llevar acciones por todo el levante a único título personal, sin el mandato de nadie. Tras saquear este Denia, la taifa de Lérida se vuelve a aliar con Berenguer II de Barcelona contra el Cid, y este nuevamente les derrota en una batalla en Morella. Consigue que los aliados catalanes renuncien a sus intereses en levante, y Rodrigo se convierte en un protector que cobra tributo a una decena de taifas del levante, entre ellas Valencia, Tortosa, Sagunto o Denia.

Dado el poder del campeador, Alfonso VI se alía con Sancho de Aragón, Berenguer II de Barcelona y algunos estados italianos para asaltar las taifas levantinas y arrebatarle su poder, pero fracasan. Rodrigo en represalia, saquea La Rioja en un nuevo conflicto de intereses personales.

En el año 1093, el Cid lanza finalmente una ofensiva contra la ciudad de Valencia, a la que accede tras ser sitiada durante un año. Se proclama a sí mismo "Princeps Rodericus Campidoctor" creando un señorío hereditario aparte de la realeza. Comienzan así unos años turbulentos en los que el Cid se alía con el nuevo rey Pedro I de Aragón, y el nuevo Conde de Barcelona, Ramón Berenguer III. Juntos libran muchas batallas contra los mahometanos, como las de Cuarte y Bairén, de las que salen victoriosos. La unión del Cid con la realeza se hace patente, pues su hija Cristina es casada con un infante de Pamplona, y su hija María hace lo propio con el Conde de Barcelona, haciendo así a Rodrigo ancestro de varios reyes posteriores de la península.




En julio de 1099 el príncipe Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador, fallece en la ciudad de Valencia. Su esposa doña Jimena, ahora Señora de Valencia, logra mantener sus dominios durante unos años más, con la ayuda de su yerno R. Berenguer III. Finalmente, dado el fuerte empuje de las tropas almorávides, todo el séquito del difunto Cid, abandona Valencia en el año 1102, que con el socorro del amigo y enemigo rey de León y Castilla Alfonso VI, les facilita el traslado a Burgos, donde el Cid es enterrado.

Las leyendas en torno a esta gran figura se han sucedido durante siglos. Pronto algunos manuscritos de la época narraron todas sus gestas, en documentos tan conocidos como el Cantar de Mio Cid, o la Historia Roderici. Famosos se hicieron su inseparable caballo Babieca, o sus triunfales espadas Tizona y Colada.




Dicen las leyendas que tan temido fue este caballero, que incluso despues de muerto fue embalsamado y montado a caballo por sus tropas, ya que al verle sus enemigos huían, pues temían enfrentarse a él. Tal es su leyenda que se suceden por España los topónimos con el apelativo "del Cid", como varias poblaciones y montañas de las provincias de Burgos, Castellón y Alicante.

El Cid, don Rodrigo y su esposa doña Jimena, descansan hoy día en la Catedral de Burgos.

martes, 11 de enero de 2011

CRISTOBAL COLÓN: El descubridor

Cristóbal Colón fue un personaje enigmático. Toda su historia se ve envuelta en una gran incógnita: no se sabe donde nació.

Se especula con que pudo nacer en 1451 o en 1456. Según los estudios realizados, lo más probable es que fuese oriundo de la República de Génova, hoy día en Italia. Sin embargo, Colón no dominaba la lengua italiana, y la mayor parte de sus escritos conservados son en la lengua española. Estos estaban además mezclados comunmente con muchos portuguesismos y latinismos, lo que tampoco deja claro cual era la lengua materna del navegante. Incluso se dice que hablaba la lingua franca, un idioma mestizo, que fusionaba elementos de muchos idiomas, y que era comunmente usado por navegantes y comerciantes de todas las naciones del Mediterráneo.

Colón, de hecho, nunca firmaba los documentos con su nombre, sino que siempre utilizó otras palabras, y firmaba en un principio como Xpo FERENS (portador de Cristo, es decir, Cristóbal), y posteriormente lo hacía como El Almirante.



No se tiene mucha constancia de como fue la vida del navegante hasta 1476. En este año, en un viaje a Inglaterra sufre el ataque de un corsario, y su barco naufraga en las costas del sur de Portugal. Desde ahí, Cristóbal se trasladó a Lisboa. En dicha capital vivió varios años, y en 1479 contrajo matrimonio con doña Felipa Moniz, perteneciente a la nobleza portuguesa, con la que tuvo , un año después, su primer hijo, Diego Colón. Durante los años sucesivos, vivieron entre Lisboa y las islas de Madeira y Porto Santo. Cristóbal realizó mientras tanto numerosos viajes a través de las rutas de navegación portuguesas, hacia las Islas Británicas y hacia el Golfo de Guinea.

Se dice que probablemente, en algun viaje al norte de Europa, Colón tomó las ideas de marineros islandeses, los cuales aseguraban llegar a tierra hacia el oeste en una distancia mucho menor a la que se suponía que se encontraban las tierras del sol naciente. En esa época, el comercio de la seda y las especias a través de Asia se había resentido, sobre todo por la expansión islámica en Oriente Medio, por lo que las rutas marítimas con oriente y las Indias para comerciar sin intermediarios, se hicieron más importantes.



Por ello,  en 1483 Colón presenta por primera vez sus planes para explorar la nueva ruta atlántica. Su propuesta es examinada por Juan II, rey de Portugal. Pese a gustarle la idea, esta se rechaza tras ser analizada por la Junta dos Matemáticos, que consideran desorbitado el coste del proyecto.

En 1485 muere Felipa, su esposa y dada la falta de apoyo por la corte portuguesa, Cristóbal decide trasladarse con su hijo al vecino y pujante Reino de Castilla, buscando financiación para su empresa. En sus inicios, se hospedó en el monasterio de La Rábida, en Palos de la Frontera. Allí comienza a hacer amistades de personajes próximos a los Reyes Católicos. Pronto se trasladó a Córdoba, donde se encontraba instalada la itinerante corte real española. Esto le sirvió para acercarse aun más al entorno real, y su amistad con Hernando de Talavera, le consiguió una audiencia con la reina Isabel, a la que le expuso su proyecto. Esta se interesó por sus planes, pero ordenó que fueran analizados por un consejo que, tras reunirse en la Universidad de Salamanca, determinan el proyecto como inviable.

En Córdoba conoce a Beatriz Enríquez de Arana, fruto de la que nace su segundo hijo Hernando. En estos años Colón intenta volver a vender su proyecto en Portugal, y tambien lo intenta con otros personajes de la nobleza española, con todos sus intentos en vano. En 1491 es llamado por la reina Isabel, quien le asegura que se hará cargo de su empresa tan pronto conquisten Granada. El proyecto vuelve a ser rechazado por costoso. Al final, sale adelante gracias al valenciano Luis de Santángel, quien concede en préstamo 1.140.000 de maravedíes.

En abril de 1492, tomada Granada, el Conde de Elda en representación del reino, pacta las condiciones de las Capitulaciones de Santa Fé. En dicho documento, los reyes otorgaban a Colón los títulos vitalicios y hereditarios de Almirante y Virrey, así como gobernador general de los territorios descubiertos o ganados. Le correspondía además un diezmo de los beneficios de dicha empresa, y algunos privilegios jurídicos y económicos más. Además la corona se comprometía a poner a su disposición varias carabelas dotadas de triuplación.



Una vez de vuelta al puerto de Palos de la Frontera, Colón fue recibido como un extraño, y se vió envuelto en serias dificultades para conseguir tripulación. Pronto contactó con prestigiosos marineros locales, como es el caso de Martín Alonso Pinzón. Este ofreció parte de su fortuna personal en dar más financiación a la empresa, y usó sus contactos para arrendar las naves necesarias y dotarlas de tripulación.

Finalmente el 3 de agosto de 1492 partían de Palos 3 barcos y 90 tripulantes repartidos en una nao, la Santa María (capitaneada por Cristóbal Colón); y dos carabelas, la Pinta y la Niña, capitaneadas por Martín Alonso Pinzón y Vicente Yañez Pinzón respectivamente. La flota hizo una escala de varias semanas en las Islas Canarias, en Gran Canaria y La Gomera, de donde parten de nuevo el 6 de septiembre. El viaje fue muy largo y tortuoso, donde la desesperada tripulación llevó a cabo varios motines, sofocados por los hermanos Pinzón.



El 12 de octubre de 1492, el día que se cumplía el plazo de ultimatum del capitán para dar por suspendida la expedición, el grumete Rodrigo de Triana da el grito de "tierra a la vista". Arriban así al primer territorio americano descubierto, la isla de Guanahani (San Salvador) en las Bahamas. El viaje continuó por Cuba y La Española, donde la malograda Santa María quedó encallada. Se construyó la primera colonia con los restos de la nao y allí quedaron algunos tripulantes. La Pinta llegó a Bayona el 1 de marzo del siguiente año, y la Niña a Lisboa 3 días despues.



Colón fue recibido por los reyes, y pronto las nuevas se fueron repartiendo por toda Europa. El almirante realizó 3 viajes más en los que se exploraron las Antillas, la costa de Venezuela, y el istmo de Centroamérica, a pesar de lo que Colón no era consciente de encontrarse en un nuevo mundo, sino que creían que eran tierras del lejano oriente, dentro de los dominios del Gran Kan.

La Española, gobernada por Colón y sus hermanos, sufrió revueltas, ya que las condiciones de vida eran muy duras, los tesoros de la isla escasos, y no se seguían las órdenes de la corona de tratar a los indígenas como súbditos de Castilla. Por ello Cristóbal sería detenido y enviado a España, donde finalmente muere en Valladolid, el 19 de mayo de 1506.

La historia del almirante Colón no acaba con su muerte, pues la polémica surgida con sus restos se ha extendido a lo largo de los siglos. Fue enterrado inicialmente en Valladolid, de donde fue trasladado al Monasterio de la Cartuja en Sevilla. En 1542 el cuerpo fue trasladado, por deseo de su hijo Diego, a la ciudad caribeña de Santo Domingo. Tras la ocupación francesa en 1795 fue trasladado a La Habana y en 1898 fue traído de vuelta a la Catedral de Sevilla, donde permanecen hoy en día.

No obstante, en su ataud no se encuentra todo su esqueleto, por lo que probablemente los restos del almirante descubridor, se encuentran repartidos entre Sevilla, en el viejo mundo, y Santo Domingo, en el nuevo.